No te limites: Cambia tu actitud

Intenta crear hábitos más saludables en la búsqueda de empleo y empieza a entender que el cómo te sientas depende de ti.
Emma Salamanca
26 abr 2011 · 5 minutos de lectura

Me gusta el enfoque que aporta el evento PinkSlipParty, gracias a los diferentes ponentes que colaboran y a la apuesta por los coordinadores del evento por elegirles y ser más innovadores en la búsqueda de empleo.

Después de la ponencia de Marta Romo hablando sobre la importancia de las emociones y llevando a cabo una mirada interior hacia donde quiero ir, este post va a dejar en un segundo plano temas tan repetidos de cómo hacer un CV y todo tipo de información que por suerte podemos encontrar en numerosos sitios de la red, para pasar a un primer plano algo tan humano como las emociones y su gran aliada, la razón. (Os resultará muy interesante leer: El caso Phineas Gage: las emociones y la toma de decisiones).

Cuando nos encontramos en búsqueda de empleo, es bastante frecuente que estemos agotados psicológicamente. Buscar trabajo es un trabajo en sí mismo y no sólo tenemos que saber hacer el CV, tener un papel activo por las redes profesionales, inscribirnos a ofertas de empleo adaptadas a nuestro perfil, etc., sino también mantener una excelente actitud, ese impulso y disposición mental que nos dirige a la consecución de nuestros objetivos.

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Mi papel hoy va a ser de mala malísima, así que quién no esté preparado para leer comentarios que hieran su sensibilidad, mejor que no siga leyendo, porque os puedo asegurar que las siguientes reflexiones son muy molestas y es bastante probable que tu primera reacción sea la misma que yo sentí; malestar y mucha incomodidad.

Si optas por seguir leyendo, has elegido ser el protagonista de tu vida, dejar a un lado el papel pasivo de víctima y cualquier excusa a la que hayas recurrido siempre, porque de nada te van a valer, excepto para engañarte, no cambiar tu situación actual y convertirte en un títere para los demás. ¿Estás preparado? Pues comencemos entonces a ver a la vida desde otra perspectiva.

Vamos a empezar por un ejemplo que me enseñó José Ballesteros en el programa "LiderA".

  1. Observa estas 3 figuras:

  2. Si te pregunto: ¿Quién miente?, ¿Quién dice la verdad?, ¿los 3 mienten?, ¿los 3 dicen la verdad? Es complicado contestar a las anteriores preguntas y más sin saber ¿con respecto a qué?.

  1. Pero y si te pregunto ¿quién tiene más oportunidades de estar en lo cierto?. Seguramente no hay duda de que sabes la respuesta.

La percepción que tenemos de la vida depende de cómo elijamos mirarla. De ti depende si quieres ver la vida como un círculo, como un cuadrado o como un prisma. Evidentemente aumentamos las probabilidades de éxito si observamos el mundo que nos rodea desde varias perspectivas.

Ya que he me puesto en modo científica, pasamos de un enfoque geométrico a uno más neurofisiológico ¿sabías que 1 minuto de cabreo requiere 48 horas para eliminar el cortisol de la sangre?, ¿y qué 1 minuto de ternura genera hemoglobina en la sangre y nos hace más inmunes? Un sólo abrazo desencadena sustancias químicas que mitigan el estrés. No sé cuál habrá sido tu cara a leer esto, pero cuando Marta Romo nos lo comentó en el último evento de PinkSlipParty puedo asegurarte que mi cara fue un auténtico poema.

Sin meternos mucho en temas de neurociencia y fisiología del cerebro, siento decirte que por mucho que te pese y por muy cómodo que te sientas con tus excusas: PODEMOS ELEGIR como pensar, como sentir y como actuar en la vida. El problema que tenemos el 99% de las veces es que preferimos victimizar porque creemos que no podemos, no queremos y no sabemos cambiar la situación, ¡¡¡error pensar así!!!, se puede salir del estado de confort y pasar a un estado de cambio. (Te aconsejo leer el post ¿Por qué nos cuenta tanto cambiar?)

Sabemos que estar trabajando, nos aporta tranquilidad y estabilidad emocional, por lo que si estás desempleado, es normal que estés preocupado por no encontrar trabajo y más que se adapte a tu expertise y motivaciones profesionales. Cada vez que tienes una entrevista de trabajo, o te inscribes a una oferta de empleo, te ilusionas y cuando tu candidatura es descartada, sientes frustración, impotencia, rabia, que si no controlas, te generará apatía, falta de confianza en ti mismo y sensación de falta de control sobre tu vida.

Si te encuentras triste (emoción) y te das mensajes negativos como “no voy a encontrar trabajo”, “me van a descartar en la entrevista personal”, “soy un incompetente”, etc. (pensamientos), decides tener una actitud pasiva y quedarte tumbado en el sillón (comportamientos) no hay duda de que estás reforzando que nada cambie y por tanto seguirás aún más triste, victimizarás sobre tu situación y te verás incapaz de salir de ese maldito bucle.

Tal vez no puedas evitar en un determinado momento sentir tristeza, miedo, impotencia, apatía y todas esas emociones que te paralizan, pero si depende de ti la duración de esa emoción. Tú eliges si quieres enfrentarte a la búsqueda de empleo con una actitud positiva predispuesta a conseguir el objetivo, o con una actitud negativa que te amargue y te obstaculice conseguir lo que quieres.

Intenta crear hábitos más saludables en la búsqueda de empleo y empieza a entender que el cómo te sientas depende de ti. Por muy injusta e insensible que te parezca esta reflexión, te puedo asegurar que es el éxito, no sólo en la búsqueda de empleo sino para tener el control de tu vida, **porque tú y nada más que tú eres el protagonista.

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